En América Latina nuestra lucha habrá de tener por campo de batalla el enfrentamiento al ALCA y la lucha a favor de los mercados regionales y la Soberanía Alimentaria.
    

        
      Desde los atentados del once de setiembre todo el movimiento de la Resistencia Global sufrió un fuerte retroceso y las demandas y reivindicaciones locales parecieron muchas veces superadas por un clima sicótico de enfrentamiento a los ejes del mal y las exigencias de un rediseño planetario. Sin embargo, las luchas de los Pueblos y las crecientes torpezas acumuladas por la conducción del Imperio han creado las condiciones necesarias para confiar que esta etapa de generalizada ofensiva se detenga primero y se revierta luego. El relativo fracaso de la última reunión del G8 es un signo auspicioso para nuestras luchas, ya que además de disidencias en relación a cambio climático y a los derechos humanos, fueron posturas irreconciliables frente a la Biotecnología las que lograron separar a las grandes potencias en la reunión de Canadá. Si le sumamos a ello las nuevas disposiciones de la UE respecto a subsidios para pequeños productores e identificación de transgénicos, incluidos los piensos de soja argentina, comprobamos una vez más que la confrontación de diversos modelos no cesa pese a la gigantesca fuerza del Imperio y de las Transnacionales. En América Latina nuestra lucha habrá de tener por campo de batalla el enfrentamiento al ALCA y la lucha a favor de los mercados regionales y la Soberanía Alimentaria. Las anticipaciones del Gerente de Monsanto en la Argentina que transcribimos más abajo respecto a las nuevas etapas de integración vertical por las que transitará la agricultura nos pintan un futuro terrorífico, pero nos permiten anunciar las nuevas amenazas para sumar aliados y oponer estrategias de desarrollo local y de seguridad alimentaria. A las cadenas integradas agroalimentarias debemos enfrentarlas con la telaraña social de los pequeños productores y de las organizaciones de la Sociedad Civil. Esa construcción no es sencilla, pero por estar su naturaleza en la raíz misma del pensamiento americano fundado en la tierra y en las prácticas comunitarias, tiene a su favor toda la enorme fuerza de lo Cultural.

      Muchos amigos latinoamericanos nos consultan acerca de la Campaña Soja Solidaria en la Argentina y quisiéramos explicarlo porque en cierto modo se corresponde a situaciones que todos han conocido en sus propios países. Muchas veces nuestras redes han denunciado la acción devastadora de las Ayudas Alimentarias tanto sobre los pequeños productores como sobre las pautas culturales de la población en general. De eso mismo se trata, pero en un país extremadamente polarizado donde se mezclan en confusión el primero y el cuarto mundo. Para evitar un estallido por hambre y para preservar el modelo agroexportador de insumos sin valor agregado, los grandes productores de soja y los mercenarios de la Semilleros han imaginado una campaña monstruo de distribución gratuita de soja forrajera a los hambrientos. La campaña se basa en la donación de un kilo de soja por cada tonelada de exportación y se apoya en la desesperación de los hambrientos y en la estulticia de la dirigencia política y de organismos de ayuda social de la Iglesia como CARITAS. De esa manera se esta implementando un gigantesco ensayo de laboratorio sobre la población argentina más pobre, a la que se alimenta como a ganado y con transgénicos. Aún no podemos medir las consecuencias de estas políticas alimentarias masivas pero hemos anticipado que muy posiblemente sean desastrosas, en especial para la salud y la vida de los niños que concurren a comedores públicos y también para los lactantes, ya que se presiona a las madres para que se los alimente con mamaderas de la mal llamada leche de soja. Una vez más, la extensión del campo de confrontación por el enemigo nos ha regalado nuevos aliados y oportunidades para el esclarecimiento y la denuncia. Antes era una lucha en solitario la nuestra contra los OGMs, ahora es una lucha política que se despliega en todo el territorio y que suma constantemente nuevos actores. En eso estamos y creemos que el dominio del modelo sojero en la Argentina esta tocando su techo y encontrando desafíos que difícilmente podrá resolver. Si algo podemos lograr nosotros es el inscribir esta lucha contra las transnacionales de las semillas y contra los OGMs en los debates políticos que tratan de refundar a este país y evitar su disolución como Nación Soberana. Estas luchas se pondrán al rojo vivo en estos próximos meses en que la Argentina debatirá por su existencia y nosotros confiamos en poder mantenernos en el centro de la tormenta.-EcoPortal.net

      La coordinación de la REDALLT
      Extraído del Boletín No. 83
      Red Por Una América Latina Libre De Transgénicos

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      ARGENTINA Y MONSANTO, el maíz en el centro de un gran debate rural

      Un análisis simple de los márgenes brutos comparativos de los cultivos de granos gruesos para la campaña 2002-2003 revela que el maíz está en una clara desventaja comparativa respecto de sus competidores estacionales, especialmente la soja. En principio resulta más caro y deja menos margen en la mayoría de las zonas. Sin embargo, por lo menos 600 personas muy interesadas en esta gramínea asistieron durante dos extensas jornadas a Mundo Maíz, un congreso específico para productores y técnicos, organizado por Sema Consultores, en la ciudad de Buenos Aires. Hay tres poderosas razones que sustentan esta inusual inclinación por un cultivo que podría decirse que este año sufrirá los embates de la "sojización" profunda de las zonas agrícolas argentinas. La primera es que los productores argentinos toman sus decisiones agronómicas pensando en el mediano y corto plazo: no sólo por el monto de dinero en sus depósitos a la vista. Saben perfectamente que el maíz es una pieza esencial en sus rotaciones, por el volumen de cobertura vegetal que otorga, especialmente en los cultivos en siembra directa, aun cuando los números fríos no justifiquen plenamente su inclusión en la campaña que se acerca. La segunda está vinculada con situaciones circunstanciales y de coyuntura: la búsqueda casi frenética de algún grado de certidumbre que tienen todos los habitantes del país. Las reuniones, congresos y todo aquello que implique compartir buena información vienen como anillo al dedo en las actuales condiciones. Y finalmente, la tercera se relaciona con un planteo que realizó Carlos Becco, Ejecutivo de la empresa Monsanto en la Argentina: "Estamos comenzando a transitar una nueva etapa en la evolución de la tecnología agropecuaria. Está quedando atrás la era de los sistemas que se caracterizaba por el desarrollo de la siembra directa, la soja RR y el Maíz Gard. En la actualidad entramos en la era de la integración....La nueva era de la integración se asienta sobre bases más complejas, como la agricultura corporativa, la identidad preservada y la integración vertical, en donde entran todos los actores de la cadena: productores, elevadores, alimentos balanceados, industria, etcétera. La tecnología que haga la diferencia será el resultado de un buen management y de la información correcta." Este no es un cambio menor, cada vez con más asiduidad aparecerán nuevos modelos de negocios agrícolas integrales y sobre todo estas cadenas agroalimentarias que siempre tienen al productor por el cuello como a perro con traílla. -EcoPortal.net