¡NO A LA GUERRA, NO A LA POLITICA TERRORISTA DEL IMPERIALISMO!

¡UNIDAD AMPLIA DE TODAS LAS FUERZAS DEMOCRATICAS, PATRIOTICAS Y
ANTIIMPERIALISTAS!

Dirección Política Nacional (DPN)
MOVIMIENTO PATRIA LIBRE (MPL)
Paraguay


1. EL PUEBLO NORTEAMERICANO, VICTIMA DE LA POLITICA TERRORISTA DE SU GOBIERNO.

Los lamentables sucesos ocurridos el 11 de setiembre en New York,
Washington y Pensylvania, con la muerte de miles de civiles en
atentados terroristas, constituyen el resultado de la propia política
terrorista del gobierno Imperialista de Estados Unidos.  El Gobierno de
los Estados Unidos es el principal ideólogo, organizador y financista de
la guerrilla ultraderechista de Ben Laden en contra del gobierno
Soviético en Afganistán (1979-1989) la que a partir de la invasión y
ataque sistemático de EE.UU. contra Irak (1991) se volvió uno de sus
principales enemigos. Ben Laden y su organización aparecen  hasta el
momento como principales responsables de los atentados en USA.

2. EL IMPERIALISMO Y SU POLITICA TERRORISTA A NIVEL MUNDIAL.

El gobierno USA  por décadas se dedicó a instalar gobernantes tiránicos
en el Medio Oriente que respondieran a sus políticas de dominación
imperial  y a  apoyar  la política sionista y de persecución al Pueblo
Palestino. En Asia invadió y bombardeó masacrando a la población civil
al pueblo de Vietnam. En Sudáfrica por décadas apoyó el apartheid. En
América Latina fue el principal mentor de las dictaduras militares para
enfrentar el avance del movimiento revolucionario en la época de la
guerra fría, contándose en estas luchas contra las dictaduras unos 90
mil desaparecidos. Recientemente en Europa a raíz de los conflictos
internos en Yugoeslavia se abrogaron el derecho de intervenir y
bombardear masiva e indiscriminadamente a la población.

El terrorismo de Estado y el terrorismo sin rostro de los escuadrones
para-militares es una vieja política del imperialismo norteamericano
para someter a los pueblos a su dominio neocolonial y existen
suficientes documentos que respaldan esta intervención norteamericana en
nuestro continente : contra Cuba Socialista en los sucesivos intentos de
invasión Playa Girón, los bombardeos y atentados contra la población
civil y los propios intentos de asesinato dirigidos por la CIA en contra
del Presidente Fidel Castro; el golpe militar para el derrocamiento del
gobierno socialista en Chile y el asesinato del presidente Salvador
Allende;  la invasión a Granada y el asesinato de su presidente Maurice
Bishop, la invasión a Panamá, la intervención militar en Centroamerica
contra  Nicaragua, Salvador, Guatemala, Honduras; la actual
participación y apoyo directo en el Plan Colombia con  la guerra sucia
de los paramilitares que asesinan miles de dirigentes de la sociedad y
la población civil para sembrar el terror y evitar los cambios sociales
por los cuales está luchando el movimiento revolucionario y popular en
ese país hermano.


3. EL TERRORISMO DE ESTADO ACOMPAÑA LA POLITICA DE DOMINACION
IMPERIALISTA

El imperialismo como forma de dominación y explotación de los pueblos  a
nivel mundial ha concentrado su mayor poderío desde la segunda guerra
mundial en los Estados Unidos. Los modelos de explotación  económica, la
dominación política y militar que violan la Soberanía Nacional para el
mejor aprovechamiento de los centros económicos imperialistas de EE.UU.,
Europa y Japón, constituyen el eje sobre los cuales se impone a nuestros
países determinados modelos políticos. En las décadas de los años 50, 60
y 70, con el auge del movimiento revolucionario y de liberación
nacional, los países imperialistas (Estados Unidos, potencias Europeas y
Japón)  propulsaron en América Latina, Asia y Africa, brutales
dictaduras militares y un terrorismo de Estado abierto cuyos resultados
son miles de presos políticos, asesinados, exiliados y desaparecidos
(América del Sur, Centroamérica, Libia, Argelia, Sudáfrica, Irán, India,
Pakistán entre otros).

La extracción de materias primas y la utilización irracional de los
recursos humanos de nuestros países, la contaminación, los bajos
salarios, los bajos precios internacionales a los productos agrícolas y
a las materias primas exportables, el atraso tecnológico y científico,
las cadenas de la Deuda Externa y la dominación del mercado financiero,
y la profundización en la etapa actual del dominio de las grandes
trasnacionales de los mercados nacionales e internacionales con la
política neoliberal, constituyen la directriz del modelo social impuesto
por el imperialismo a nivel mundial con sus graves secuelas sociales :
desempleo, miseria, subdesarrollo y millones de muertes anuales por el
hambre y las enfermedades curables.  Bajo este modelo de dominación y en
relación a los niveles de lucha de nuestros pueblos, el imperialismo ha
realizado históricamente una combinación de formas de dominación
políticas que van desde regímenes de libertades políticas relativas
hasta las más feroces dictaduras militares que han propiciado y
alardeado el terrorismo de Estado en contra de la población civil, las
organizaciones revolucionarias y patrióticas.


4. CON EL PRETEXTO DE LA LUCHA CONTRA EL TERRORISMO,  EL IMPERIALISMO NORTEAMERICANO PRETENDE REFORZAR SU HEGEMONIA.

"O están con nosotros, o están con los terroristas" es la palabra de
orden de las clases dominantes en Estados Unidos que frente al avance de
la respuesta política de los pueblos oprimidos tratará en todo el
planeta de infligir fuertes derrotas a las organizaciones democráticas,
populares, patrióticas y antiimperialistas.

Estamos nuevamente frente a un momento grave de la situación mundial
donde existe el peligro cierto de resurgimiento de las propias entrañas
del imperialismo de sus tendencias fascistas que, bajo el afan y el
pretexto de vengar contra Ben Laden y su organización lo ocurrido el 11
de setiembre, pasará a golpear a toda organización democrática, popular,
revolucionaria, patriótica, antiimperialista, o a cualquier Estado
Soberano que se oponga al mundo Unipolar que pretende construir el
imperialismo norteamericano.

Frente a las inevitables y cada vez más profundas contradicciones del
dominio imperialista de los Estados Unidos, su gobierno se ve compelido
a buscar nuevos enemigos en todo el mundo que justifiquen el accionar de
su economía de guerra para lograr una recuperación económica. A la vez
en el plano político internacional esta soberbia sin límites del
discurso guerrerista, bélico e intervencionista del gobierno de los
Estados Unidos, sólo comparables con la soberbia demencial de los
Romanos y de Hitler, es un claro anuncio no sólo para los pueblos y
Estados oprimidos de todo el mundo por el imperialismo norteamericano,
sino incluso para los Estados  Europeos, de Japón, Rusia  y China
Popular, en el sentido de consagrar y volver incontestable su hegemonía
unipolar política y militar.

5. DEL ANTICOMUNISMO DE LA GUERRA FRIA A LA "GUERRA CONTRA EL
TERRORISMO" Y EL COMBATE AL NARCOTRAFICO:  UNA MISMA HISTORIA DE LA DOMINACION IMPERIALISTA Y DE SU TERRORISMO ECONOMICO.

El Imperialismo mundial sustentó por décadas su política represiva
contra los pueblos del mundo en el pretexto del "anticomunismo" en el
período de la guerra fría que enfrentó  las potencias capitalistas
lideradas por Estados Unidos y sus aliados Europeos al poderío del
Bloque Socialista liderado por la Unión de Repúblicas Socialistas
Soviéticas (URSS).

Bajo la política anticomunista se persiguió a cuanto opositor hubiera
contra los regímenes militares y despóticos que el imperialismo impuso
en la mayoría de los países del Tercer Mundo. Se erigieron las Doctrinas
de la Seguridad Nacional para la cuál todo movimiento de lucha social
por el cambio en cualquier país era visto como parte de la amenaza
"soviética", socialista o comunista. Al amparo de esta doctrina los
gobiernos de las oligarquías alineadas al imperialismo cometieron
crímenes de lesa humanidad en masa contra sus poblaciones.

Desde los primeros años de los noventa, una vez que desapareció la URSS
y los países del llamado bloque socialista tomaron diversos caminos, se
produjo una distensión de la política internacional. En esta nueva
situación en que desaparece el pretexto del "comunismo",  el
Imperialismo norteamericano, con la connivencia de sus aliados Europeos,
empieza a perfilar dos ejes que sirven de pretexto a su política de
intervención y dominación político-militar : el narcotráfico y el
terrorismo.

El llamado "Plan Colombia" constituye el más colosal proyecto de
intervención político y militar en América Latina propulsado por los
Estados Unidos, como una forma de detener el avance de las fuerzas
revolucionarias y de cambio democrático en ese país. Estados Unidos, que
es el mayor consumidor de drogas en el mundo,  antes que llevar la lucha
contra el narcotráfico en su propio territorio combatiendo la adicción
de la juventud y el tráfico de las mafias económicas de los capitalistas
gringos,  sin embargo realiza un emplazamiento político y militar contra
los países productores de hojas de coca y otras materias primas
naturales que le sirven a los narcotraficantes para la producción de la
cocaína. Pero la guerra no se realiza contra los verdaderos responsables
del negocio de las drogas que están en el mismo territorio de los EE.UU.
y que son los principales lavadores de dinero y de las mafias económicas
especulativas a nivel mundial, sino que se utiliza el pretexto de la
"lucha contra el narcotráfico" para llevar una guerra contra los pueblos
que luchan por su liberación. La política de supuesta lucha contra el
narcotráfico tiene hoy su centro fundamental en Colombia, pero se
extiende por toda América Latina y el Caribe con operaciones militares
directas de intervención de los EE.UU. y la instalación de bases como la
de Manta (Ecuador).

El pretendido "Escudo Antimisiles" de los EE.UU. para luchar contra un
enemigo no definido, deriva ahora luego de los atentados en su
territorio con mayor fuerza en la declarada "Guerra al Terrorismo".
Esta "primera guerra del siglo XXI" como la denominan los imperialistas
yanquis ahora se viene a unificar con el combate al narcotráfico para
desatar una nueva ofensiva política contra los pueblos del mundo.

"Combate al narcotráfico", "guerra al terrorismo" y la continuación de
la brutal explotación y opresión de las naciones y pueblos del Tercer
Mundo, constituirán de ahora en adelante los ejes de la política del
imperialismo mundial.   Estos constituirán el justificiativo  no sólo su
TERRORISMO POLÍTICO Y MILITAR en la dominación  de los pueblos y
naciones oprimidas. También  del TERRORISMO ECONÓMICO causante de
millones de muertes anuales de personas por causa del hambre, la
pobreza, la miseria, la mala nutrición, enfermedades curables y otras
causas que tienen su raíz en la política de explotación y dominación del
imperialismo, y que no constituyen los titulares ni la preocupación de
la gran prensa mundial como los 500 mil  niños que murieron por falta de
alimentos y medicinas en Irak tras 10 años de bloqueo de las potencias
imperialistas.


6. NUESTRO LLAMADO AL MOVIMIENTO ANTIIMPERIALISTA MUNDIAL Y AL PUEBLO NORTEAMERICANO.

Así como el imperialismo norteamericano fue derrotado por los heroicos
pueblos de Vietnam y Cuba, así como numerosos Estados en los cinco
continentes no aceptan unilateralmente los dictados de la política
imperialista, así como en numerosas partes del mundo los pueblos
resisten la ofensiva neoliberal y la intervención política y militar del
imperialismo nortamericano, en esta coyuntura histórica que vive la
humanidad.

¡NADIE ACEPTARA EL DESTINO DE LA BARBARIE Y GUERRA DEL IMPERIALISMO!
¡POR CIENTOS DE MILES SEGUIREMOS LEVANTANDO EN TODO EL MUNDO LAS BANDERAS DEL COMBATE  ANTIIMPERIALISTA!

¡CONVOCAMOS A  LA UNIDAD AMPLIA DE LAS FUERZAS PATRIOTICAS, DEMOCRATICAS Y ANTIIMPERIALISTAS PARA DETENER  LA GUERRA Y LA BARBARIE IMPERIALISTA!
El único camino para la Paz Mundial es la lucha por una nueva sociedad
donde se respeten la Soberanía de las Naciones y los Pueblos,  cese el
Intervencionismo Político y Militar del Imperialismo, y se imponga una
política de desarrollo encaminada a la justicia social.

Al pueblo norteamericano, que hizo historia oponiéndose masivamente a la
intervención imperialista a Vietnam y a otros pueblos del mundo, que es
sensible a las reivindicaciones de los pueblos oprimidos, y que en
Seatle con la imponente manifestación de un millón de personas ha
demostrado su férrea oposición a la globalización neoliberal y
antihumanista propulsada por su gobierno en alianza con los principales
gobiernos de las trasnacionales en todo el mundo, LE CORRESPONDE UNA
LUCHA FUNDAMENTAL PARA IMPEDIR MAS GUERRA CONTRA LOS PUEBLOS OPRIMIDOS.
Al  pueblo norteamericano y a los que en su seno luchan contra las
injusticias, contra el racismo, contra la discriminación de los latinos
y tercermundistas, a cuyo frente están destacadas organizaciones
religiosas,  de la sociedad civil y políticas, LE EXPRESAMOS NUESTRA MAS
PLENA SOLIDARIDAD Y PESAR POR LAS MILES DE VICTIMAS INOCENTES DE LOS ATENTADOS TERRORISTAS DE 11 DE SETIEMBRE DEL 2001.